TRAPITOS EN PALERMO QUE TRABAJAN BAJO “ÓRDENES DE ARRIBA”

Rodrigo tiene 33 años, es trapito en Palermo Soho y actualmente cobra $50 pesos a cualquier auto de noche. Comenzó a poner precios fijos desde el año pasado, cuando la Policía de la Ciudad de Buenos Aires empezó a reclamarle cierta cantidad de dinero (no aclara cuánto) por semana a cambio de permitirle trabajar en el barrio a partir de las 8:30 pm. Cabe destacar, que tampoco sabe cuándo y quién pasa a cobrar.

Por ese motivo, Rodrigo recibe $50 pesos fijos por coche, por un lado para pagarle a la Policía, y por el otro para quedarse con una parte de lo recaudado. Además, el “dueño” de algunas calles de la zona también le cobra (no especifica cuánto). Rodrigo señaló que algunas veces, ese “dueño” (quien mueve a trapitos en un camión) lo manda a estacionar autos a partidos de fútbol y a distintos eventos, situaciones en las que los precios son más elevados. 

A su vez, Pato, ex trapito, tiene 43 años, y además de ser remisero y trabajar con un camión, es dueño de algunas de calles en Palermo, es quien “mueve” a cuidacoches y quien vigila que los más jóvenes se comporten y no tengan conflictos con la policía. Explicó que lleva a trapitos en su camión al Estadio Único de la Ciudad de La Plata cuando hay recitales, y cuenta que les cobra un porcentaje, pero sólo por el traslado al lugar. 

Ambos testimonios dejaron en claro la existencia de una relación constante y clandestina entre los trapitos y la policía de la Ciudad de Buenos Aires. Se trata de un vínculo que permite a los cuidacoches continuar con su actividad ilegal, y cobrar por ese trabajo cierta cantidad de dinero, de la cual gran parte es destinada obligatoriamente a las autoridades policiales para que los mismos les permitan continuar cuidando coches en distintos barrios de Capital Federal.